Spanisch: Eine der meistgesprochenen Sprachen der Welt
Hola, ¿qué tal? ¡Esperamos que estés bien!
Du interessierst dich für ein Spanischstudium? ¡Qué buena elección! Ja, Spanisch ist sicher eine gute Wahl – immerhin wird es in 22 Ländern von weit über 400 Millionen Menschen gesprochen. Es zählt zu den wichtigsten der 24 Amtssprachen der EU und ist eine der sechs UN-Sprachen. Somit bietet ein Spanisch-Studium nicht nur Einblick in eine einzige, sondern in eine Vielzahl von verschiedenen Kulturen!
Um dein Studium der spanischen Sprache bei uns am Institut zu starten, benötigst du das Sprachniveau A2. Die folgenden Beispielaufgaben könnten dir so oder so ähnlich bei der Sprachprüfung begegnen – vielleicht kannst du ja schon die eine oder andere Aufgabe lösen?
Leseverstehen: La historia de la papa
Lies dir den folgenden Text gut durch und beantworte im Anschluss die nachfolgenden Fragen dazu!
La patata, como le dicen en España, o papa, su nombre de origen, es un alimento básico en nuestra cocina hoy en día, tanto en América como en Europa y prácticamente todo el mundo. ¿Quieres saber algo de su origen?
La palabra “papa” es un vocablo quechua, es decir, forma parte sustancial de las culturas andinas desde el principio de sus tiempos. La papa cultivada tiene más especies silvestres (228) que cualquier otro cultivo.
Los primeros en tener un notable dominio de este cultivo, que se presentaba en la base de su alimentación, eran los Incas. Para facilitar su crecimiento en zonas montañosas, creaban las famosas terrazas que hoy en día se pueden ver en los cerros si viajas a Perú o a Bolivia.
Fue descubierta por los españoles en 1537. Llegó a España hacia 1550 y desde allí se extendió por toda Europa durante el siglo XVI. Durante la conquista española en América del Sur, al principio la papa fue despreciada, pues no había costumbre de consumir raíces y para la gente del viejo mundo era casi “irracional” adoptarla como un alimento ordinario. Incluso cuentan las leyendas europeas que este tubérculo era causante de la lepra. En Rusia la llamaron “planta del diablo”, los católicos decretaron que “era pecado” consumirla pues no se la mencionaba en la Biblia, otros opinaban que causaba “flatulencia” por lo que se limitó su uso para el ganado o como una planta de decoración.
